¡Puedo correr la carrera del barrio!

En un principio no iba a poder correr la carrera del Zofío, a celebrar el próximo 20 de junio, pero me han dado la gran noticia de que sí voy a poder correr. Que gran noticia. Por contra, en la carrera contra el SIDA, a la que estaba ya inscrito, no voy a poder participar. Una cosa por la otra.

No es que esta carrera sea la más bonita, ni la más rápida, ni nada de nada, ¡pero se celebra en el barrio! Si no pude participar en la carrera de Usera celebrada en enero, por lo menos puedo correr en ésta. Tan contento estoy, que he abierto un tema en el foro de elatleta.com para ver si se anima la gente a correr esta carrera. Lo malo es que ese día hay ¡¡¡ocho carreras!!! en Madrid y alrededores.

Cartel carrera del Zofío
Cartel carrera del Zofío

Hoy nos ha caído una buena chupa de agua. Durante la mayor parte del entrenamiento llovía ligeramente, pero en los dos últimos kilómetros ha llovido a jarros. Afortunadamente no hacía frío ni mucho aire y se podía soportar.

Como casi siempre, íbamos a dar una primera vuelta tranquila, pero antes de terminar la primera ya íbamos encendidos y en la segunda hemos empezado a darle de lo lindo. Yo iba controlando un poco para no ir excesivamente deprisa, pero siempre acabas yendo más rápido de lo que deseas. Más detallado, aquí.

1ª vuelta (4,8 km): 25:50 @ 5:23/km
2ª vuelta (4,8 km): 20:25 @ 4:15/km

Total (9,6 km): 46:15 @ 4:49/km

Un puntito más

Hemos empezado con la tontería de «venga, un puntito más» y nos hemos ido acelerando cada vez más. De hecho, miraba el reloj y pensaba «si vamos igual de deprisa que en la carrera del domingo». Así ha pasado, que el entrenamiento ha acabado casi sin darnos cuenta.

Ha sido un entrenamiento rápido. Y además hacía bastante calor, por lo que se puede pensar que ha sido un entrenamiento duro. Mientras iba corriendo pensaba que quizás no sea mala idea hacer los rodajes más rápidos de lo que acostumbro, que a veces son demasiado lentos.

Como hacemos últimamente, hemos dado dos vueltas al circuito viejo, por lo que no hemos llegado a completar los 10 km que supuestamente hacemos. En total han sido 9,75 km en 47:12 a 4:50/km.

Al final no hemos conseguido llegar a la docena de corredores necesarios para llevarse el jamón en la carrera de la hoz del Huécar, así que otro año que no vamos.

Más vale tarde que nunca

Hoy no he podido llegar a tiempo a la cita habitual. Una reunión para hablar de la carrera del Zofío, a disputar el próximo 20 de junio me ha entretenido más de la cuenta y he llegado un cuarto de hora después al punto de encuentro. Afortunadamente -para mí- estaban esperando Quique y Joaquín, con los que he empezado el entrenamiento. Algo después nos hemos encontrado con Emilio con el que hemos recorrido gran parte de los kilómetros.

Tenía pensado hacer un entrenamiento con cambios de ritmo, haciendo tres minutos fuertes y dos y medio suaves, pero entre unas cosas y otras, no ha sido posible hacerlo tan concienzudamente, por lo que he hecho tres cambios de ritmo en las cuestas, sin tener en cuenta ritmos ni distancias. Han sido en total 12,12 km en un tiempo de 1:05:35.

Aunque amenazaba lluvia, al final hemos tenido suerte y no nos hemos mojado, pero parece que ha cambiado algo el tiempo y hoy ha sido más fresco. Mejor.

Parece que no completamos los doce necesarios para optar al jamón en la carrera de la Hoz del Huécar. Tendremos que conformarnos sólo con el de Jadraque.

La irresistible tentación del jamón

Acabamos de venir de Jadraque, como aquel que dice, y ya estamos pensando en ir a Cuenca a la carrera de la Hoz del Huécar a por otro jamón. Para conseguir este segundo es necesario ir una docena de corredores del mismo club entre los que se incluya una mujer y, por supuesto, todos deben llegar a meta. Me da la sensación de que esta vez lo vamos a tener más difícil para completar el equipo. A mí la verdad es que me gustaría ir porque todo el mundo me ha hablado muy bien de esta carrera, pero o vamos todos o ninguno.

El domingo, después de la media de Jadraque no estiré y el lunes y hoy notaba una pequeña molestia en el tendón de aquiles por lo que estiré bien antes de salir de casa. Lo cierto es que después de una carrera hay menos tiempo para hacer nada, pero hay que buscar unos minutillos para estirar, que luego se puede pagar. Espero que esas molestias se me acaben quitando o me voy a acordar de Jadraque y su jamón el resto de mis días.

Esas molestias me hicieron ser prudente durante el entrenamiento y procuré no forzar en todo momento, así que fue un buen entrenamiento de recuperación porque aunque hagas una carrera más despacio de tu ritmo normal, las piernas también lo sienten.

Como viene siendo habitual desde que hicimos la maratón, y dado que ya hay luz a las horas que salimos, el entrenamiento consistió en dar dos vueltas al antiguo circuito de Pradolongo, completando un total de 9,64 km en 52:48 a un ritmo cercano a 5:30, bastante cómodo. Afortunadamente no me resentí de las pequeñas molestias.

Al terminar, con nuestras habituales dotes de persuasión, conseguimos convencer a Emilio para que nos acompañe a Quique y a mí el próximo domingo en la carrera Liberty, por lo que seremos tres pradolongueros los que nos demos cita en la calle Goya.

Repito con las Joma Marathon 3000

En el mes de mayo del año pasado, concretamente el día 27, estrené unas Joma Marathon 3000 que me habían regalado. En esos momentos no sabía bien que tenía entre los pies y las utilicé ¡¡¡para los 100 km!!! Entonces no sabía ni que modelo eran, pero después me he enterado que son unas zapatillas de las llamadas voladoras, es decir, zapatillas para atletas de élite, para correr por debajo de los 32 minutos en un diez mil.


Joma Marathon 3000

Y no es que me considere atleta de élite ni mucho menos, pero con esas zapatillas mis pies han sufrido menos que con cualquier otra y eso no deja de ser curioso porque son zapatillas de menor amortiguación de lo normal, de hecho están únicamente recomendadas para entrenamientos de calidad y competición sobre asfalto. Y para eso las quiero, para alguna carrera y para cuando haga entrenamientos a toda pastilla, que no sé si serán de mucha calidad o no.

Con este estreno rompo la tradición de tener sólo un par de zapatillas. Ahora utilizo tres pares, a saber:

  • Joma Marathon 3000: para entrenamientos de calidad y competición.
  • Joma Speed VIII: para entrenamientos normales.
  • New Balance 1224: para realizar estiramientos.

Para comprobar si la mercancía era de buena calidad, he repetido el entrenamiento del pasado jueves, haciendo tres miles intercalados con trote cochinero. Eso sí, he tratado de hacer los tres miles algo más rápidos que la semana pasada. Así, el primer mil lo he hecho en 3:55, el segundo en 3:49 y el tercero en 3:40. Me doy por satisfecho porque hoy hacía muuucho más calor que el jueves pasado y los tiempos han sido algo mejores.

Quique tuvo el detalle de inscribirme a la carrera Liberty Seguros. El precio de la inscripción es de 8 € por lo que se puede considerar razonable según los cánones en los que nos movemos hoy en día. Es un diez mil homologado por la RFEA con un objetivo algo ambicioso: reunir diez mil corredores en la línea de salida. No sé si será fácil a estas alturas de temporada. Aparte de lo malo del inmenso pelotón es que hay que recoger el dorsal días antes en El Corte Inglés de Castellana.

Seguimos a la búsqueda de un grifo en el parque de Pradolongo. Hoy, de pura casualidad y porque había unos jardineros, hemos encontrado una fuente con grifo. Es, muy probablemente, la única fuente con grifo en todo el parque. Si ya el verano pasado me quejaba de este problema, este año vamos por el mismo derrotero. Según contaba un jardinero, los grifos son robados en cuanto los ponen. Increíble.

Hay que estar al loro

Hay que estar al loro porque en cuanto se descuida uno, se queda más tirado que una colilla. Eso es lo que me ha pasado hoy, que en la primera vuelta me lo he tomado con bastante calma y en la segunda vuelta ya ni veía a mis compañeros de entrenamiento. Y eso que me he puesto a 4:30 para tratar de alcanzarlos, pero su ventaja era ya enorme. El jueves me desquitaré…

Hoy hacía bastante calor. Decía un compañero que el termómetro marcaba 30º, pero me parece excesivo, aunque es probable que estuviéramos a veintitantos. Cuando salí de casa y cuando iba por los primeros kilómetros me encontraba mal, el calor me estaba afectando, tenía las piernas como piedras. Afortunadamente, según iban pasando los kilómetros me fui encontrando mejor.

Y es que el calor se hacía sentir y debido a ello, después de dar las dos vueltas, estábamos todos más secos que la mojama y, como siempre, las fuentes del parque sin funcionar. A veces no tienen grifo y a veces tienen grifo pero no tienen agua. Vamos, que no hay agua de ninguna manera. Así que quedamos en llevar una botella de agua para poder beber después del entreno.

¡Tres cuarenta!

Ayer hice un kilómetro en 3:40, algo inaudito para mí. Hace años y años que no corría tan deprisa durante un kilómetro y total ¿para qué? Pues para nada, tendré que buscar alguna carrera de 10 km para ver si estoy rápido o no, aunque ese tiempo me hace pensar que sí.

No tenía intención de correr rápido ya que el martes fue un entrenamiento medio duro, sin embargo hablando con Quique sobre la marcha decidimos hacer este entrenamiento para variar un poco la rutina de siempre. Los cuatro primeros kilómetros fueron de calentamiento y luego empezó el festival. Primer kilómetro rápido en 3:57 (el objetivo era bajar de 4:00). Segundo kilómetro en 3:54 (ahora se trataba de mejorar un poco el kilómetro anterior). Y tercer kilómetro, en el que se trataba de ir a muerte, en ¡¡¡3:40!!! Ni yo mismo me lo creo y eso que durante gran parte de ese kilómetro marcaba 3:36, pero los últimos metros eran ascendentes y eso se nota.

Venus en el parque de Pradolongo
Venus emergiendo del agua (parque de Pradolongo)

¿Algún pradolonguero ha visto alguna vez esta estatua? Es obra de Angel Aragonés y se llama Venus emergiendo de las aguas.

Emilio nos pone firmes

Llevábamos un tiempo después de la maratón bastante tranquilos, corriendo o más bien trotando sin ninguna pretensión, sin embargo hoy Emilio se ha cansado y ha empezado a apretar y al final casi todos hemos picado y hemos acelerado el paso. No tenía intenciones de correr más rápido de 4:30, pero Ninfa, viendo que se iban los galgos, ha acelerado más y más y la cosa ha ido in crescendo: 5:33, 5:06, 5:03, 4:28, 4:25 y 4:20. Prefiero dejar los días rápidos para el jueves, pero hoy no nos hemos podido contener. A quien he visto francamente bien ha sido a Joaquín, que ya empieza a coger la forma.

Antes de la carrera vino a visitarnos Macu y se la veía muy contenta de su actuación en la maratón de Praga. Era su primera maratón y el resultado ha sido notable, creo que ha cumplido con creces en su estreno maratoniano.

Separando el grano de la paja

Parece que la gente de Mapoma ha hecho limpieza en las clasificaciones de la última edición de la maratón. Si al acabar la carrera aparecían 8292 llegados a meta, hoy aparecen 7663, por lo que hay, supuestamente, 629 tramposos. Esto quiere decir que un 7,5% de la gente hizo el recorrido ilegalmente. Me parece un porcentaje bastante alto.

En mi caso concreto, he avanzado del puesto 1269 de la clasificación general al 1101, por lo que he mejorado 168 posiciones. A mí me da igual quedar el 1269 que el 1101, pero no está bien que gente que puede optar por un trofeo en alguna categoría (léase Emilio el hombre radiactivo) tenga que estar llamando a Mapoma para ver si arreglan la clasificación y que encima pasen de él.

Para terminar, decir que me cuesta trabajo entender como alguien, en una carrera como ésta, en la que el 99,9% corre contra sí mismo haga trampas. Es engañarse a sí mismo.

Hoy Macu se ha despedido de nosotros, que mañana parte para Praga. Todos la hemos deseado buena suerte para su debut en la maratón. Con lo que ha entrenado, no creo que tenga ningún problema para terminar en las mejores condiciones la carrera.

Me he animado a realizar dos vueltas completas a Pradolongo, por el circuito antiguo, a ritmo tranquilo, por supuesto. Han sido 9,6 km en 57:50, a un ritmo de 6:00/km. Habrá que ir pensando en acelerar un poco más.

Seguimos recuperando las patas

Todavía sigo tranquilo rodando pocos kilómetros y a ritmo tranquilo, comentando todavía las sensaciones de Mapoma. Hoy ha venido Ninfa que salió algo tocada en el pie de la carrera, pero esta chica es dura como una roca. Emilio comenta que todavía no sabe nada de su posible tercera posición en categoría J-M. Después del entrenamiento he mirado en internet y todavía sale como primero un individuo que sólo tiene el tiempo de paso de la meta. Tramposo seguro.

Hemos hecho dos vueltas al circuito viejo, totalizando 9,6 km en un tiempo de 57:50, a un ritmo trepidante de 6:00/km, pero creo que es un buen ritmo para recuperar las piernas. Emilio II preguntaba que cuando íbamos a correr más deprisa, pero ahora mismo no tengo ninguna gana. Además me da miedo apretar por si acaso acabo rompiéndome.