Válvula de escape

Ayer sábado estuvimos todo el día de excursión por lo que no pude salir a correr. El viernes hasta las dos de la mañana y hoy me ha tocado trabajar 🙁 Así que a eso de las seis de la tarde veía que reventaba. Necesitaba una válvula de escape. Había que elegir entre salir a correr o algo peor, así que elegí la primera opción claramente.

Me vino de perillas salir a correr sin pensar en el reloj, simplemente corriendo por correr, tratando de que la cabeza se despejara. Correr es sin lugar a dudas un relajante como no hay otro, una antidepresivo natural sin igual. Si esto no existiera, habría que inventarlo, pero está claro que lo llevamos en nuestros genes.

Hoy salí en solitario. Ya no hacer el calor que ha hecho estos días y se corre mucho mejor, sin ese agobio que supone llevar la boca pegada y totalicé 9 km (tres vueltas a Parque Sur) en un tiempo de 45:59 @ 5:07 min/km. Volví a casa más suave que un guante, que era de lo que se trataba.

Señalando los kilómetros

Ayer no pude salir con los habituales de Pradolongo, así que hoy salido con una buen amiga con la idea de marcar los kilómetros de la carrera del Zofío del próximo domingo. Primero un par de kilómetros por Parque Sur para que el GPS se fuera ajustando y luego hacia la salida de la carrera donde marqué el kilómetro cero y desde allí a marcar el resto. Mañana tengo que ir con una persona de la Agrupación Deportiva Marathon para marcar con cal el recorrido por el parque. Esperemos que la carrera del domingo sea una fiesta extraordinaria.

Aunque hemos salido casi a las nueve de la noche, todavía el calor se dejaba notar. No sé que hubiera sido de nosotros si hubiésemos salido a la hora habitual.

Tampoco era cuestión de hacer muchos kilómetros, así que sólo hemos recorrido 7,5 km en un tiempo de 45:54 @ 6:06 min/km. Un ritmo muy lento, provocado principalmente porque había que parar cada kilómetro para señalarlo con una tiza.

No lo había comentado, pero ayer nos juntamos un buen grupo de pradolongueros en el bar de Nico a tomarnos unas cervezas bien acompañadas de excelentes raciones. Se portó bien el compañero Nico. El remate final de las tortitas fue la guinda de la tarta. Extraordinarias tortitas las que pueden degustarse en la cafetería Payma.

Primeros pasos

Llevaba tiempo dando vueltas al asunto de correr descalzo, pero la experiencia de acortar la zancada y sentir que la rodilla iba mejor me ha decidido a dar este paso. Últimamente parecía un ciborg con zapatillas bien amortiguadas, plantillas ortopédicas y calcetines altos. Todo muy sofisticado, aunque tengo que reconocer que toda esta parafernalia me ha dado buen resultado, de hecho llevo bastante tiempo sin lesionarme. Por lo tanto, correr descalzo no es más que un experimento del que no sé si tendré que dar marcha atrás.

Ayer sábado salí a andar descalzo por Parque Sur, combinando caminos con arenilla, con caminos algo más limpios de tierra y sobre todo, por hierba, que es lo más cómodo al ser un terreno más mullido. No es fácil así de repente ponerse ni siquiera ponerse a andar descalzo, pero es una experiencia interesante que todo el mundo debería hacer, aunque cuando se te clavan las chinas, fastidian que no veas. Aprovechaba algunos tramos de hierba para trotar sobre ella, tratando de observar la técnica que aconsejan para correr sin zapatillas: zancada corta y rápida, apoyo del metatarso, cadera algo más baja para flexionar las rodillas y cuerpo relajado. No sé si lo he hecho bien o no, ya que no me veo, pero la experiencia resultó muy gratificante, aunque al final la planta del pie acaba protestando. Hice aproximadamente un recorrido de 4 km y calculo que troté unos 500 metros. No sé si me pasé o me quedé corto.

Aspecto del pie después de mi primer entreno
Aspecto del pie después de mi primer entreno

Ni corto ni perezoso, viendo que el aperitivo del sábado me había sabido a poco, hoy domingo he salido de nuevo a Parque Sur con la intención de seguir una rutina similar, pero metiendo más distancia y tratando de trotar algo más, pero andando mucho más tiempo que trotando, claro está. De nuevo la experiencia me ha resultado gratificante mentalmente hablando, pero reconozco que los pies no están acostumbrados a estos terrenos y las plantas sufren lo suyo cuando el camino tiene arenilla o chinas de tamaño pequeño. Afortunadamente, no he sufrido ninguna herida en las plantas.

He hecho un recorrido total de casi 6 km, trotando algo más de 2 km. Me parece que me he pasado con el trote, ya que ahora, cuando escribo estas líneas noto que los metatarsos están ligeramente doloridos. Por un lado, es buena señal porque indica que apoyo lo que tengo que apoyar, pero tiene la lectura negativa de que me he pasado de kilometraje, ya que he pasado de hacer 500 metros el día de antes a hacer más de 2 km un día después. Mucha tela, hay que ir más poco a poco.

Alternando andar y trotar descalzo
Alternando andar y trotar descalzo

Veremos cómo evoluciona la cosa y espero que las plantas se vayan acostumbrando, porque cuesta un poco andar por determinadas superficies.

Granizada

Hoy hacía un frío de narices en Madrid. Y no sólo frío, también viento, lluvia y granizo. No es que haya caído mucho granizo, pero ha estado siete u ocho minutos granizando brutalmente, justo en pleno entrenamiento y ya que me dolía la cabeza y las orejas de esas pequeñas bolas de hielo que me golpeaban sin piedad.

Y menos mal al granizo, porque la última muestra de hipocresía del rey me estaba sacando de quicio y le iba a poner verde en esta entrada, pero gracias a este peculiar tipo de precipitación me ahorraré de decir que el rey es un sinvergüenza y que ya está bien que se gaste el dinero de los contribuyentes en cacerías y similares. Ya está bien que en el siglo XXI todavía existan estos anacronismos absurdos que no sirven absolutamente para nada, sino es para despilfarrar el dinero de los demás.

De nuevo, gracias al granizo tampoco tendré que decir que hoy es el 81º aniversario de la II República y que ya va siendo hora de que llegue la III porque esta forma de gobierno no tiene ni pies ni cabeza.

Por el mismo motivo también, me ahorraré tener que poner la bandera republicana en su aniversario.

Bandera republicana
¡Viva la república!

Entre unas cosas y otras, hoy salí tarde a entrenar, ya casi a la hora de comer. El objetivo era hacer unos kilómetros, ya los últimos, a ritmo de maratón. Así que he ido a Parque Sur con la idea de dar cuatro vueltas de 3 km cada una. Una primera vuelta de calentamiento y luego a ponerme sobre 4:30 en las otras tres.

Dicho y hecho. Una primera vuelta a un ritmo de 5:00 poco más o menos y luego bajando al ritmo objetivo de 4:30, a veces unos segundos por encima, a veces unos pocos por debajo. Eso sí, cuando estaba finalizando la tercera vuelta, cuando ha empezado a granizar, el ritmo ha aumentado sin querer, haciendo ese kilómetro, que encima era cuesta arriba, a 4:19. Después, vuelta a los ritmos de 4:30.

He totalizado las cuatro vueltas, es decir, 12 km en un tiempo de 55:04 @ 4:35 min/km.

Malas horas para correr

Hoy sábado me ha tocado trabajar por la mañana, aunque afortunadamente, no suele ser una cosa habitual. Eso ha provocado que saliese a correr a una hora totalmente intempestiva: a las dos y media de la tarde y, por supuesto, sin comer. Y se ha notado porque he acabado desfallecido, he llegado a casa que devoraba.

Habitualmente utilizo los sábados para entrenar a ritmo de maratón, pero dado que tuve problemas en el gemelo, he preferido no forzar y hacer un rodaje a un ritmo más asequible, aunque por Parque Sur que es un circuito un poco más duro que Pradolongo o que bajar al río. Incluso a ese ritmo, he llegado cansado y sobre todo asustado pensando en lo que me queda mañana, que esta semana es la más larga del entrenamiento maratoniano.

El entrenamiento de hoy ha consistido en recorrer 20 km en un tiempo de 1:37:26 a un ritmo de 4:52 min/km, obteniendo 28,4 puntos.

La báscula me ha dado una mala noticia. Marcaba nada más y nada menos que 68,3 kg ¡¡¡un kilo y medio más que la semana pasada!!! Me da la sensación de que o la semana pasada pesó de menos, o ésta ha pesado de más. Por curiosidad volví a pesarme después del entrenamiento y marcaba 66,0 kg. Nada menos que 2,3 kg de pérdida de peso en 20 km. Una burrada.

Pensando en Villarrobledo

Después de la media de Getafe, pensé en la media de Villarrobledo como objetivo de la primera mitad de la temporada. Siempre ha sido Mapoma el objetivo, pero este año, para no obsesionarme con la maratón pensé en esta carrera que tanto me gustó el año pasado. Es por ello, que todo el entrenamiento de estos dos meses y medio han ido enfocados a esta carrera. Y el objetivo no es otro que hacer 1h27, mejorando la marca de Getafe que fue de 1:28:07. Tampoco es un objetivo muy ambicioso, sólo hay que bajar ocho segunditos y estoy convencido de poder hacerlo. Lo mejor de todo es que no estoy nervioso ni me estoy comiendo la cabeza con ello y de Mapoma, ni me acuerdo casi, tiempo habrá de pensar después del domingo.

Como mañana sábado me va a resultar complicado correr, he salido hoy viernes con la consigna habitual antes de una carrera de hacer no muchos kilómetros a ritmo tranquilo y hacer unos pocos progresivos, ni muy largos, ni a tope. Y eso es lo que he hecho. He salido acompañado por una amiga, que también irá a Villarrobledo, y hemos recorrido 8,6 km en un tiempo de 46:57 @ 5:26 min/km durante los cuales hemos hecho cinco progresivos cortitos.

Bonita estampa primaveral
Bonita estampa primaveral

Tercer paso

Hoy he dado el tercer paso en el camino de participar en la maratón de New York: he comprado los billetes de avión. Si después de pagar la inscripción todavía podía tener dudas de ir o no, ya no hay vuelta atrás, allí estaré el próximo noviembre.

Como muchos sábados, el entrenamiento consistía en hacer kilómetros a ritmo de maratón, es decir, por debajo de 4:30. Una primera vuelta en Parque Sur (3 km) de calentamiento y otras tres vueltas más (9 km) a ritmo de maratón. La verdad es que en este parque cuesta mantener un ritmo constante porque es todo subir y bajar. Los nueve kilómetros han salido a una media de 4:25 min/km, mientras que el entrenamiento total ha sido de 12 km en un tiempo de 54:18 @ 4:32 min/km.

Pensaba que había perdido algo de peso, pero me he llevado una sorpresa al ver que pesaba 100 gramos más que la semana pasada. Es decir, que ya son 67,7 kg lo que llevo a cuestas.

Maratoniano o maratonista

Siempre había llamado maratoniano a la persona que corre maratones, pero resulta que me confundía. Según la RAE maratonista es la persona que corre el maratón, mientras que maratoniano se define como perteneciente o relativo al maratón. Espero no equivocarme a partir de ahora y consideraré a esos locos que se atreven con la distancia de Filípedes como maratonistas y no maratonianos.

Al final va a ser verdad el dicho de que a la cama no te irás sin saber una cosa más.

Hoy he salido a las doce de la mañana y hacía una calor… Parece mentira que hace unas semanas hiciera un frío del carajo y hoy, todo lo contrario. Calculo que la temperatura rondaría los 15º, por lo que me sobraba la camiseta de manga larga y las mallas, también largas.

Sigo teniendo las piernas algo cansadas. Me parece que los quinientos del otro día me han dejado las piernas tocadas, por lo que he desechado hacer kilómetros a ritmo de maratón y me he conformado con ir rodando a buen ritmo. Una primera vuelta de 3 km más tranquilo y luego he apretado un poco, pero sin querer pasarme de ritmo, sólo he apretado los dientes en el último kilómetro que además era cuesta arriba.

Han sido cuatro vueltas a Parque Sur totalizando 12 km en un tiempo de 57:08 @ 4:46 min/km. Este entrenamiento me ha supuesto 18,9 puntos de intensidad.

El peso sigue su ritmo ascendente. Debo cortarme más con la comida porque últimamente ando un poco ansioso y debería llegar a Villarrobledo con un peso decente, cercano a los 67 pelaos, así que ya me puedo ir cortando con el condumio. Por poco no lo digo, la báscula marcaba 67,9 kg, rondando la barrera que debería ser infranqueable de los 68.

Buen día

Llevábamos unas semanas con bastante frío, pero lleva un par de días que la temperatura se ha templado y se está mucho mejor en la calle. Cuando he salido a eso de la una y media hacía hasta calor, tanto que incluso me ha sobrado la manga larga.

Estaba dudando si hacer unas series a umbral o no. Al final se ha impuesto la cordura y he decidido no hacerlas; no obstante he estado rodando fuerte en Parque Sur, que es un terreno durillo. Pues eso, ni chicha ni limoná. La media de Fuencarral es una carrera dura que te deja las piernas algo tocadas y no conviene forzar más de la cuenta y lesionarse.

Después de una vuelta de calentamiento (3 km) he hecho 7 km a ritmo de maratón, rondando los 4:25, a veces unos segundillos por arriba, otras, unos segundos por debajo, pero 4:25 de media. Para terminar, un kilómetro de enfriamiento, lo que supone un total de 11 km en un tiempo de 51:10 @ 4:39 min/km.

La báscula marcaba esta mañana un peso de 67,7 kg un poco más que la semana pasada. Voy a tener que tomármelo más en serio, que esto va in crescendo, aunque esta tarde toca celebración cumpleañera y va a ser difícil controlarse.

Ha llegado el invierno de verdad

Aunque el invierno llegó oficialmente en diciembre, estos días sí son realmente invernales. El jueves en el entrenamiento ya hacía frío, pero esta mañana cuando he salido a las nueve, el frío se notaba y mucho, aunque iba bien pertrechado: mallas largas, camiseta larga, sudadera, guantes y braga en el cuello. Sólo me faltaban los calzoncillos largos. Aún así, cuando soplaba el viento, se echaba de menos un abrigo de esquimal.

No sabía que hacer hoy. Mañana se celebra el trofeo Marathon de cross y me apetece correrlo, pero no tengo dorsal. Me acercaré a temprana hora por si hay alguno sobrante. Entonces, no sabía si ir tranquilo o hacer un día de calidad, cosa que no hice el jueves. Al final, ni una cosa ni otra. He dado un par de vueltas tranquilas y luego he apretado un poco el paso, haciendo algunas cuestas, no las más duras, pero que se notaban en las piernas, tanto que al final he acabado cansado. Como mañana participe en el cross, lo voy a notar.

He completado cuatro vueltas en Parque Sur realizando 12 km en un tiempo de 1:00:18 @ 5:02 min/km. He conseguido con este entrenamiento 14,6 puntos. Llevo poca cosa esta semana.

Antes de salir y después de vaciar el vientre (no del todo, que luego lo he notado en los últimos metros del entrenamiento) me he subido a la báscula y marcaba 67,6 kg, 100 gramos más que la semana pasada, pero en mi línea.