A los organizadores de la maratón de Madrid se les ha ocurrido hacer una media maratón el mismo día y a la misma hora que la maratón completa. Por si no había bastante con los 10 km que parieron hace unos años, ahora también una media.
Como bien dice mi compañero Joaquín, una maratón es una prueba con suficiente entidad como para que se celebre sin ningún otro tipo de aditamento, pero no sé si por el vil metal o por querer parecer más que la maratón de Barcelona, hay que hacer crecer artificialmente la participación. Que quede claro (aunque no sirve para nada): estoy en absoluto desacuerdo con la medida. Me parece una muy mala idea.
Hoy he salido tarde de currar, por lo que he llegado tarde al punto de encuentro; sin embargo, he tenido la suerte de encontrarme con los compañeros que comenzaban la segunda vuelta. Bueno, no sé si ha sido suerte porque ellos empezaban a acelerar su ritmo y yo estaba frío aún, por lo que los he aguantado doscientos metros a lo más.
Poco después he alcanzado a Emilio II, que por fin volvemos a verle por Pradolongo, y al terminar mi primera vuelta nos esperaba Miguel que había terminado sus cambios de ritmo y que me ha acompañado media vuelta más. O sea, que el final de las dos vueltas previstas he estado bastante bien acompañado.
No sé lo que ha ocurrido con el Garmin, pero ha tardado casi diez minutos en sincronizar con los satélites. Imagino que esa tardanza ha sido debida a que el cielo estaba encapotado y esta circunstancia influye en que la señal es más débil. He encontrado un documento en esta web www.bermellelectromedicina.com muy interesante donde hablan del funcionamiento del GPS.
Hice 10 km sin contar el recorrido que hice sin GPS en un tiempo de 49:51 @ 4:59 min/km, apretando en los últimos tres kilómetros donde me quedé solo tratando de llevar un ritmo por debajo de 4:30 min/km.