…Y hundido

Decía el domingo que acabé tocado. Pues bien, ya estoy hundido. Esa molestia que empecé a notar cuando llevaba aproximadamente la mitad del entrenamiento me ha seguido dando guerra y hoy he salido a probar, muy despacio, y aunque en un principio no parecía que me molestase en exceso, según iban pasando los kilómetros notaba que iba a más y que lo mejor era parar.

Siempre he dicho que soy como Aquiles, mi punto débil es el talón, aunque esta vez no es exactamente el tendón, sino justo donde el músculo se une con el tendón. Tendré que ir a ver a Josefa, que siempre consigue solucionar mis problemas musculares.

Debido a la molestia no he completado las dos vueltas, sólo he hecho 7,8 km en 46:27 @ 5:56 min/km.

Intratable

Me sentía fuerte después de haberme probado el otro día en la milla y en los cuatro kilómetros a umbral que hice la semana pasada. Y se lo quería demostrar a Joaquín, pero lo que he comprobado es que él no es que esté fuerte, es que está intratable, no hay quien pueda con él.

Después de una primera lenta lentííííísima (5 km en 28:51 @ 5:46) hemos apretado nada más pasar ese quinto kilómetro para alcanzar el ritmo umbral y así, hemos pasado de ir a 5:32 en ese último kilómetro a 4:18. Luego hemos mantenido más o menos haciendo los siguientes en 4:17 y 4:17 y echando el resto ya en el último para hacerlo en 4:09. Media total: 4:15 en 4 km que era lo que buscábamos.

En estos cuatro kilómetros duros se ha puesto Joaquín delante, como diciendo aquí estoy yo, y me he tirado todo el rato viéndole la espalda. Desde luego, si no tiene ningún contratiempo, en la media de su pueblo se va a salir. Y espero estar allí para verlo.

Llevo unos días pensando en Fuencarral. Mi última vez que estuve en esta media fue en 2012 y supuso mi décima participación. Este año celebraré mis cincuenta tacos participando por undécima vez en esta bonita carrera. Además -acabo de ver- vuelve a su recorrido tradicional, ese que empezaba y acababa en Nuestra Señora de Valverde. ¡Bien!

En total han sido 10 km en un tiempo de 51:42 @ 5:10 min/km. Los kilómetros a umbral han salido a 4:18, 4:17, 4:17 y 4:09. Hemos tenido que apretar en el último para conseguir el objetivo de 4:15

Probándome en una milla

He comenzado a realizar hace unas semanas ejercicios de abdominales, lumbares y algo de piernas. Además también trato de subir escaleras siempre que puedo. Yo creo que me va a venir bien para conseguir más fuerza.

Hoy he salido a Pradolongo, pero no estaba mi buen amigo Joaquín… Ni ningún otro, por lo que me ha tocado entrenar solo. No era cuestión de machacarse mucho, pero quería probar si los ejercicios están sirviendo para algo o no.

No he salido tan lento como otras veces, que acabamos haciendo kilómetros a seis o cerca. He procurado ir sobre 5:30 hasta que llegara el momento de probarme. Ese momento es cuando faltaba una milla para acabar el circuito, que he puesto toda la carne en el asador, tratando de imprimir toda la velocidad que me fuese posible… Eso sí, teniendo en cuenta que una milla son mil seiscientos metros y que hay que llegar al final.

Y la verdad es que me he encontrado muy bien. Iba deprisa, pero no me costaba en exceso, me sentía poderoso, de tal forma que he hecho un tiempo de 6:25 en 1,62 km @ 3:58 min/km que indica una proyección de 6:23 la milla, bastante lejos del récord no ya de la milla, sino de la milla de la cerveza

La milla de la cerveza es una de esas pruebas que no sirven absolutamente para nada que consiste en dar cuatro vueltas a la pista de atletismo y nueve metros más y tomar una lata o botella (siempre que sea de tercio) antes de iniciar cada vuelta. El participante puede elegir la marca que más le guste, siempre que tenga al menos un 5% de alcohol y que la beba directamente del recipiente. El récord de la milla de la cerveza está en poder del canadiense Kent Lewis en 4:47.17.

Con el tiempo que he hecho en la milla (totalmente abstemia) estoy algo más cerca -aunque todavía me queda- para llegar al récord femenino, que está en poder la estadounidense Erin O’Mara con 6:08.51. Es evidente que no llego al récord de Kent Lewis de ninguna manera, ya me daría con un canto en los dientes si lograra alcanzar a Erin O’Mara, que lo veo difícil, aunque yo dejaría la cerveza para después de haber corrido, no durante como esta prueba.

Entre la milla y los kilómetros anteriores he hecho 9,6 km en un tiempo de 48:50 @ 5:05 min/km. Bastante contento con el entrenamiento porque creo que los ejercicios que hago en casa me están sirviendo.

Muy buenas sensaciones

Ya estoy pensando en el próximo objetivo, que no es otro que la media de Villarrobledo. Así que hay que hacer entrenamientos a ritmo umbral para poder completar la prueba con garantías, por lo que he pensado ir a Pradolongo a hacer cuatro kilómetros a ritmo umbral. Haciendo caso omiso a Jack Daniels que tiene su famosa fórmula para calcular este ritmo y algunos otros, me he fijado un ritmo umbral de 4:15. No sé si es correcto o no, pero no andará muy lejos.

El entrenamiento a ritmo umbral es un entreno exigente. No llega a ser tan duro como hacer series, pero tiene su enjundia. Se trata de mantener un esfuerzo constante y eso implica, si vas por terreno llano, llevar un ritmo fijo. Si el terreno tiene subidas y bajadas, resulta difícil mantener ese esfuerzo constante sin tener «algo» que lo mida, así que lo mejor es buscar un terreno llano.

El circuito que hacemos en Pradolongo es más llano que otra cosa, pero tiene una subida interesante y el final de la vuelta es cuesta arriba. Muy suave pero para arriba. La jugada es entonces no hacer esa subida más dura, aunque la pendiente más suave, pero más larga, seguir haciéndola.

La verdad es que se me ha dado francamente bien. He comenzado haciendo cuatro kilómetros de calentamiento y luego he mantenido el ritmo decentemente: 4:16, 4:14, 4:14 y 4:17. Casi perfecto. Han salido en total 9 km en un tiempo de 45:29 @ 5:03 min/km.

Feliz y próspero 2016

Otro año más que ha caído y ya estamos en 2016, por lo que lo primero es desear feliz año nuevo a todo el mundo. Hay que tener en cuenta que este año no es uno cualquiera, ya que me caen cincuenta tacos, por lo que habrá que celebrarlo como corresponde.

De momento ha empezado como debe ser, corriendo y, además, en el Parque de Pradolongo, ¡qué mejor lugar! Pero lo mejor de todo, es la compañía. Hoy nos hemos dado cita unos cuantos y alguno de ellos que llevaba algún tiempo lesionado, así que más no se puede pedir.

anio-nuevo-2016
Un buen número de pradolongueros para comenzar el año con buen pie

Hoy era un día para tomárselo con tranquilidad, ya que ayer me exprimí de lo lindo en Vicálvaro y además el primer día del año tampoco es para ir a muerte. Así que dimos dos vueltas a un ritmo muy tranquilo, charlando sobre las sansilvestres del día anterior y de cuestiones variopintas. De esta forma, se hizo un entrenamiento muy ameno y cuando nos quisimos dar cuenta ya habíamos completado el entrenamiento.

Un gran placer compartir con los compañeros este primer entrenamiento del año y esperemos que haya muchos más y, sobre todo, que nos respeten las lesiones a todo el mundo.

Fueron en total 10 km en un tiempo de 55:31 @ 5:33 min/km.

Entrenamientos mes de diciembre 2015

Después de correr hace dos días la San Silvestre de Villaverde, llegó el último entrenamiento del año. Fue el día 29 de diciembre y consistió un entrenamiento muy suave por Madrid Río haciendo el mismo recorrido que el del día 23. Tuvimos que acercarnos a una zona cercana a la Glorieta de Cádiz y desde allí nos acercamos a Madrid Río y fuimos dirección Casa de Campo, subimos por el Paseo del Embarcadero y poco antes de llegar a la valla vuelta por el mismo camino. Fueron unos 10 km a un ritmo entre 5:20 y 5:30 calculo a ojo porque no llevamos cronómetro. El domingo, el día de la San Silvestre, marcaba la báscula 69,4 kg. Me parece una barbaridad haber subido un kilo en una semana, tampoco es que me haya pasado tanto con la comida. No sé, no sé.

Es toda una tradición salir a correr el día de Navidad. La cena de Nochebuena suele ser copiosa (y eso que trato de controlarme lo más posible) y es una buena jugada salir a correr para desgastar un poco lo comido. Además este día también toca comida familiar, así que todo lo que se queme bien está. Había convocado un entrenamiento conjunto a las 11:00 en el punto de encuentro a todos los compañeros y compañeras pradolongueras que quisieran asistir y nos juntamos cuatro, que no está nada mal. Bajamos al Parque Lineal y nos cascamos 14 km a un ritmo algo más tranquilo que el día anterior. Lo único malo es que casi al salir del Parque Lineal me tropecé con una piedra y caí al suelo. Menos mal que llevaba guantes y manga larga, así que no me rocé en ninguna parte. Y con este día de Navidad han sido tres días corriendo seguidos, cosa que no suelo hacer, que añadido al entrenamiento que hice el lunes y la San Silvestre que haré el domingo, sumarán cinco día de entreno, parezco casi un profesional 🙂

Me gusta salir a correr el día de Nochebuena, es una tradición, igual que ir a hacer la ronda con los amigos por lo bares del barrio después y cantar villancicos. Así que quedé con Joaquín a las nueve de la mañana y bajamos al Parque Lineal. Al llegar al parque incrementamos el ritmo, aunque tampoco exagerado, y tratamos de mantener ese ritmo vivo durante todo el trayecto por el parque. Luego al salir, de vuelta a Pradolongo, ya bajamos la velocidad y volvimos más tranquilos. En total hicimos 14 km en un tiempo de 1:11:00 a un ritmo de 5:04 min/km. Por cierto, hacía un frío de mil demonios, andaba la temperatura por los dos grados únicamente.

Esta semana navideña estuve de vacaciones, así que el día 23 de diciembre lo aproveché para salir por la mañana con la luz del día. Fui con una amiga por Madrid Río, ya que por un asunto tuvimos que acercarnos a un lugar próximo a la Glorieta de Cádiz. Cerca de allí nos acercamos a Madrid Río y por allí hicimos el recorrido que he descrito en el último entrenamiento del año que, curiosamente, es el primero de esta entrada. Fueron en total 10 km en un tiempo de 50:38 @ 5:03 min/km. Los cinco kilómetros de ida fuimos a un ritmo no muy fuerte, pero sin dormirnos, y a la vuelta hicimos cuatro kilómetros a muy buen ritmo, bajando de 4:45.

El día 21 de diciembre, un día después de las elecciones generales salí a correr con una amiga para celebrar algo, no sé el qué, ¿quizás el fin del bipartidismo? Como salimos por la mañana, decidimos acercarnos al Parque Sur, porque por la noche, según cuentan, está muy mal iluminado. En un principio se nos pasó por cabeza hacer algunas cuestas, pero nos dimos cuenta que las cuestas de la Carrera del aceite nos habían dejado las piernas bastante cansadas y hacer otra vez cuestas… Mejor para otro día. Así que hicimos tres vueltas, tratando de no acercarnos demasiado a la A42 para no respirar demasiada mierda, aunque sospecho que un poco más dentro del parque tampoco soluciona nada. Hicimos tres vueltas y un poco más para completar 10 km en un tiempo de 52:39 @ 5:15 min/km. No está nada mal para haber corrido a tope dos días antes. Por cierto, que ya empieza a notarse que estamos en el mes de diciembre, porque la báscula marcaba hace un par de día 68,4 kg. Ya he vuelto a subir otra vez a los 68. Como lo hablaba el otro día con Joaquín, este mes de diciembre no sólo no vamos a perder ese kilo, sino que habrá que tratar de no coger muchos.

El 17 de diciembre estábamos a dos días del sábado 19, que era el día en el que llegaba una de las carreras más emotivas del año, la Carrera del aceite, que se celebra en mi pueblo, en Los Navalmorales. Así que no era cuestión de cansar las piernas en este último entrenamiento previo a la gran carrera. El año pasado había estado entrenando específicamente para esta carrera, haciendo muchos días cuestas, pero este año, el entrenamiento para la media de Villaverde me había desviado de este objetivo y dos días antes no iba a hacer ya gran cosa para mejorar el asunto, así que tranquilito, charlando con Joaquín completamos las dos vueltas y un poquito más para totalizar 10 km en 55:53 @ 5:35 min/km.

Parece que no, pero cuando salí el 15 de diciembre, una semana después de la media de Villaverde, todavía notaba las piernas algo cansadas y además tenía una bonita ampolla en el talón del pie izquierdo. La ampolla era debida a que el domingo no tenía ganas de correr, hacía frío para montar en bici y opté por ir a andar. Pero me pasé con la caminata y acabé haciendo 16 km. Curiosamente, llevo con las zapatillas corriendo desde abril y las primeras molestias que he tenido ha sido hoy ocho meses después de estrenarlas. Está claro que no se corre igual que se anda. A lo que iba, que entre eso y que el sábado tocaba carrera, no era cuestión de machacarse aún más la piernas, por lo que tocó entrenamiento suave. Y tan suave que fue que hicimos los 10 km en un tiempo de 57:03 @ 5:42 min/km. De hecho, según iba corriendo notaba que algo pegajoso me subía por la pierna, ¡¡¡era un caracol!!! Así de deprisa íbamos.

El 10 de diciembre fue el día después del gran reto. Resulta raro salir a entrenar un jueves y que el martes no haya habido entrenamiento, sino carrera, pero este año tocó así. Joaquín estaba pletórico, muy contento después de su gran carrera en Villaverde. También agradecido, decía que mi compañía le había venido muy bien para no entrenar solo estos días oscuros de otoño. Hoy, por supuesto, tocaba regenerativo, por lo que hicimos 10 km en un tiempo de 56:44 @ 5:40 min/km. Ritmo tranquilo y charla, como diría nuestro compañero Esteban, un orgasmo detrás de otro.

Después de correr la media de Villaverde, nos marchamos a casita y nos adecentamos todos, porque a las dos teníamos la gran cita de la temporada: la comida navideña pradolonguera 2015. Que estuvo realmente bien. Comimos de lujo, a muy buen precio y con una compañía inmejorable. Y en el barrio, muy cerca de nuestro amado parque de Pradolongo.

comida-pradolonguera-2015-01
Los veteranos corredores de Pradolongo rodeando al campeón del duelo

comida-pradolonguera-2015-02
Todos querían arrimarse a las chicas

comida-pradolonguera-2015-03
¡¡¡Y acabamos jugando al mus en el bar de Lico!!!

Los deberes hechos

Hoy nos hemos juntado cuatro en Pradolongo, cosa rara. Pero aún así, nos hemos tomado el entrenamiento como un descanso activo más que otra cosa. Estábamos Joaquín, Emilio, Miguel y yo. Miguel venía, yo creo, a ver cómo estaba la cosa, que en cuatro días llega el gran duelo. Pero Joaquín no ha querido mostrar sus cartas. Decía que los deberes están hechos, que no hay que estudiar en el último momento para el examen.

Como siempre Emilio nos ha acompañado una vuelta y luego hemos seguido el trío, hasta llegar hasta la parte de abajo, que nos ha abandonado Joaquín y ya sólo hemos quedado mi tocayo y yo para terminar.

Hemos ido hablando, por supuesto, de la prueba del martes, ese gran duelo al sol en Villaverde y también de la posterior comilona que nos vamos a dar los pradolongueros por aquello de la llegada de la Navidad.

En total hicimos 10 km en un tiempo de 54:16 @ 5:25 min/km.

In crescendo

Según la wikipedia, crescendo (del italiano «creciendo») son términos que se utilizan en notación musical para indicar que se debe aumentar gradualmente la intensidad del sonido. Puede usarse también para cualquier actividad donde aumenta la intensidad. Por ejemplo, del ejercicio.

Hoy hemos hecho algo de eso. No era cuestión de darse mucha caña, que ya estamos a una semana, pero tampoco era cosa de ir de paseo, así que hemos aumentado el ritmo en el quinto kilómetro para tratar de alcanzar los 4:30 pero nos hemos quedado algo lejos, ya que salió a 4:38. Luego hemos aumentado el ritmo y hemos hecho el siguiente en 4:20. Y ya hemos seguido con la tontería. Otro apretón y el tercero en 4:13 y ya el último, a tope, en 4:02. Una bonita progresión.

Al final ha salido un entrenamiento entretenido, totalizando 10 km en un tiempo de 50:29 @ 5:03 min/km.

Sobre las Glide 7

El 21 de abril de este año estrené unas Adidas Supernova Glide 7. Cinco días después corrí la maratón de Madrid con estas zapatillas. Cero molestias. Ese fue su primer punto a favor. Y un punto muy importante.

Llevo con ellas unos 850 km y debo decir que son las mejores zapatillas que he tenido nunca… Al menos que yo recuerde. De hecho, las próximas que compre van a ser las mismas. Normalmente, cuando llevo tantos kilómetros ya empiezan las zapatillas a romperse por algún sitio, principalmente por la parte interna, pero éstas están aguantando como unas campeonas.

De todos modos, no sería la primera vez que me ocurre que compro un par y estoy totalmente convencido y luego compro otro y no son iguales. Espero que esta vez no sea así y pueda disfrutar al menos mil kilómetros con ellas.

Todavía con mis zapas viejas, hemos hecho el típico entrenamiento a umbral, que nos va a venir de perillas para la media. Cinco kilómetro tranquilos para poner las piernas a tono y luego cinco tratando de mantener 4:20. Han salido los kilómetros a 4:25, 4:20, 4:16, 4:17 y 4:24. A una media de 4:21, sólo un segundo por encima de lo previsto. Bastante bien.

En total han sido 10 km en un tiempo de 49:39 @ 4:58 min/km. Una media por debajo de cinco, algo extraño entre semana.

Cambiaron las temperaturas

Estamos gozando de un otoño bastante cálido, pero esta semana han bajado las temperaturas. Así que hoy ha sido día de estreno de la manga larga. Utilizo la técnica de coger la camiseta que está más abajo en el cajón y hoy ha tocado la que nos dieron en la media de Cantalejo, que es un poco llamativa. Y más llamativa ha quedado todavía después de venir de entrenar…

extrania-sudada
Extraña sudada

Solemos tomarnos los martes con calma para hacer el jueves algo de calidad y hoy no ha sido una excepción. Una primera vuelta tranquila y una segunda, también. Así, he hecho 10 km en 54:45, un bonito tiempo capicúa.