Todo el mundo sabe que el hielo es un magnífico antiinflamatorio. Además ¿qué corredor no ha tenido alguna vez una inflamación? Pues eso, que siempre es bueno tener hielo a mano. Y como el hielo viene en trozos muy grandes y no es fácil de aplicar, siempre tengo en la nevera una bolsa de guisantes de a kilo, que me viene de perillas para aplicarme frío donde tenga el dolor. Ahora estoy con el tendón de aquiles, pues guisantes mañana, tarde y noche y, sobre todo, después del ejercicio. No sé si curará, pero alivio se siente bastante.
Remedio casero para las inflamaciones
Hoy sólo una vuelta a Pradolongo, aunque bien acompañado porque aparecieron Andrés, Miguel y, un poco más tarde, Joaquín que ha empezado a correr poquito a poquito.