Cena navideña

Hoy hemos quedado algunos compañeros pradolongueros para cenar todos juntos. Por desgracia, no hemos estado al 100%, pero es difícil que a todos nos venga bien un día.

Como habíamos quedado a las nueve, salí a correr a las 18:30 en vez de la hora habitual, para no llegar tarde. Con Emilio en la primera vuelta y con Jesús en la segunda, se me fueron pasando los kilómetros. Totalicé 10 km en 57:15 @ 5:44/km. Seguimos recuperando las piernas.

La cena fue en la Parrilla de Usera III y estuvo francamente bien. Tanto la comida como la compañía.

Cena navideña
Cena navideña

Se rompió la correa

En marzo del año pasado compré una de las herramientas más útiles para correr, un Garmin Forerunner 405. El otro día se rompió la correa, simplemente por el gesto de quitarse el artilugio de la muñeca en cada uno de los entrenamientos, porque no lo uso para otra cosa. Teniendo en cuenta el número de entrenamientos registrados, la correa del adminículo ha aguantado unas 600 «quitadas» y 6.000 kilómetros, que no sé si es mucho o poco. Pienso que podría durar más si para quitarse de la muñeca el cronómetro no hubiese que hacer tanta fuerza.

Correa del Garmin rota
Correa del Garmin rota

Rápidamente me he hecho con otra correa aquí, ¡no puedo salir a correr sin este artefacto! Como se puede ver, la correa viene con una especie de destornillador. Ese chisme sirve para quitar el pasador que sujeta la correa a la caja. Que a nadie le pase lo que a mí, que me he vuelto loco para encontrar un destornillador Torx, pensando que eran esos tornillos los que sujetaban la correa y es sólo el pasador lo que es necesario quitar.

De todas formas, reconozco que estoy bastante contento con el cacharro. Mirando en internet para tratar de comprar la correa, he visto que el precio de este chisme ha bajado bastante, imagino que favorecido porque han aparecido dispositivos de Garmin más modernos. En Amazon.es se puede encontrar por 125 machacantes. Si alguno le interesa, que eche un vistazo aquí.

Ya con la nueva correa, he salido todo feliz al entrenamiento, donde estaban los compañeros. Hemos estado comentando las vicisitudes de la pasada maratón y ya pensando en la siguiente. Joaquín habla de Sevilla, pero yo ya lo dejo para la maratón del rock&roll.

Hablando de unas cosas y otras se nos fueron pasando las dos vueltas y un poquito, para completar 10 km en 56:48 @ 5:41/km. Un ritmo tranquilísimo para ir recuperando las piernas.

Por cierto, hoy es el día de Santa Lucía. Se supone que ya empiezan a ser los días más largos, léase que habrá más horas de luz.

Una buena excusa para estirar

Debo reconocer que estirar por estirar, así sin otro aliciente, me resulta difícil; sin embargo, cuando voy a correr nadie me quita el estiramiento inicial y el final. Y como me hacía falta un buen estiramiento, he pensado que una carrerita no vendría mal para estirar las patas. Así que ni corto ni perezoso, me he disfrazado de corredor y zumbando a Pradolongo a hacer unos kilometrillos, aunque hayan sido al trote.

Tenía intenciones de salir con la luz del día, pero al final me ha podido la siesta y cuando he salido ya era de noche ¡qué lo vamos a hacer! He ido buscando tramos iluminados y tengo una idea que puede hacer un recorrido aproximado de cinco kilómetros y con luz. Habrá que ir afinando la idea.

En total sólo han sido 4,7 km en un tiempo de 30:29 @ 6:28/km, que aunque no es nada, me ha venido de perillas para estirar las piernas. Ahora me encuentro mucho mejor, parece que los cuádriceps no los tengo tan cargados.

Han puesto algunas fotos en la web de la maratón de Málaga. Ahí va una de cuando iba por el km 38, ya cieguecito. Foto cortesía de Jesús Robles.

Kilómetro 38 de la maraton de Málaga
Kilómetro 38 de la maraton de Málaga

Contando los días

Ya está la cosa a punto de caramelo, estoy contando los días que faltan para la gran cita. Y como no es cuestión de cansarse ni de lesionarse, hoy también nos lo hemos tomado con mucha calma.

El parque de Pradolongo sigue (y seguirá) horriblemente mal iluminado y resulta difícil no tropezarse en algunos tramos, menos mal que Joaquín llevaba una linterna que encendía en los tramos más complicados. Habrá que ir pensando en hacer un recorrido alternativo que esté más iluminado. Además, no sé si por el frío o por la escasez de luz, se ve poquísima gente por el parque.

Hoy se acercó el gran campeón Emilio al que estuvimos felicitando personalmente. Decía encontrarse bien después de su gran carrera y lo demostró haciendo unos kilómetros con nosotros.

Hicimos los típicos 10 km en un tiempo de 57:55 @ 5:47/km. Muy, muy tranquilos. Lo malo es que yendo a estos ritmos cansinos me como mucho la cabeza pensando si seré capaz de ir entre 4:30 y 4:35 días después.

La hidratación comienza ya

Creemos erróneamente que la hidratación en una maratón consiste en beber cuatro o cinco tragos de agua en cada puesto durante la carrera; sin embargo, hay que ir ya hidratados antes de la carrera. Una mala hidratación inicial no se arregla dando traguitos a un botella. Al menos una semana antes hay que ir hidratándose para llegar a la carrera en buenas condiciones.

Ahora bien, ¿qué significa hidratarse bien? ¿Cuántos litros de agua hay que beber? Ni idea. Yo trato de beber al menos litro y medio y me cuesta y además me tiro todo el día en el servicio; sin embargo, a algunos esta cantidad les parece de risa. Creo que la clave es mirar el color de la orina: si es transparente, la hidratación es correcta. Tampoco hay que pasarse.

Hoy, en uno de los últimos días de entrenamiento, nos lo hemos tomado con bastante calma, aunque hemos dado las dos típicas vueltas a Pradolongo. El tema de conversación ha sido ¡cómo no! el excelente resultado de Emilio en la maratón de Valencia, donde subió a lo más alto del cajón en su categoría. Y es que este hombre pocos días después de hacer 66 años, se casca 3:27:53 en una maratón, ¿alguien da más? Para hacerse una idea, esa marca con 66 años es equivalente a 2h40 si tuviese 35 tacos. O como si yo hiciese 2h53. Inimaginable.

Comparativa marcas por edades
Comparativa de marcas por edades

Entre esta charla y que estuvimos hablando de la próxima maratón, se fueron pasando los kilómetros, hasta que totalizamos los 10 km de rigor, recorridos en 56:05 @ 5:36/km. Un ritmo tranquilo, procurando no cansar las patas.

Día otoñal y soleado

Si ayer me tocó salir a temprana hora, hoy ha sido al revés, era casi la una de la tarde cuando me he puesto en marcha. En un día como el de hoy, muy soleado, se tiene la ventaja de que a estas horas, el día es más cálido. De hecho he salido con manga corta, cosa que no suelo hacer en estos últimos tiempos.

Tenía ganas de hacer unas fotos del Parque Lineal, porque estaba muy bonito estas últimas semanas, por lo que hoy me he puesto manos a la obra. Lástima que no lo hiciera la semana pasada o la anterior, porque muchos árboles habían perdido ya sus hojas y no estaba el paisaje tan bonito. Pero todavía se veía bonito el paisaje.


Parque de Pradolongo, rumbo al Parque Lineal


Carril bici, cerca del hospital Doce de octubre


El Manzanares entre frondosa vegetación


Enorme sauce


Uno de los símbolos del parque

Después de hacer las fotos me he dado cuenta de que el móvil no deja de ser un juguete para estos menesteres.

Lo que iba a ser casi un paseo, se ha convertido en un entrenamiento de parar y arrancar para hacer las fotos. Si me descuido, se convierte en un día duro de series 😉

Hoy ni siquiera he llegado hasta el final, donde está la valla. Nos hemos dado la vuelta antes, al llegar al punto kilométrico 7,5, para de esta forma, totalizar 15 km, lo que nos ha llevado un tiempo de 1:21:40 @ 5:26/km. Ya deseando acabar con los entrenamientos.

Sensaciones placenteras

Esta mañana he tenido que salir temprano a correr. Todavía hacía bastante fresquito y no se veía todavía bien; sin embargo, según iban pasando los kilómetros, la luz me iba inundando haciendo que pudiera contemplar lo que me rodeaba con otros ojos. Más tarde, según se iba elevando el sol, resultaba gozoso sentir sus rayos del sol en la cara. Es un placer sentir no sólo la luz sino el calor del astro rey, una verdadera gozada. No es extraño que el sol haya sido durante miles de años un verdadero dios.

La idea era no hacer muchos kilómetros (por aquello del tapering) y tampoco emplearse muy a fondo, por lo que aunque he salido a Parque Sur, que el circuito es un poco más exigente, me lo he tomado con calma. He completado algo más de tres vueltas y un poco más fuera de Parque Sur, totalizando 12 km en 1:02:54 @ 5:14/km. Ya queda un día menos para la gran cita.

Ya están los deberes hechos

Hoy ha sido el último día que nos lo hemos tomado un poco en serio, a partir de ahora sólo trotar y trotar hasta el día M. Y es que conviene llegar lo más descansado posible a la gran cita. Ahora lo peor que puede pasar es que se lesione uno (crucemos los dedos) o llegar pasado de vueltas. Espero que no ocurra ninguna de las dos cosas.

Después de una primera vuelta tranquila, hemos apretado de lo lindo en la segunda, tratando de hacerlo lo más rápido posible. Esa segunda vuelta (4,86 km) la hemos dado en 20:17 @ 4:10/km. Un buen entrenamiento a ritmo umbral.

He llegado bastante cansadete, por lo que al terminar esa segunda vuelta he parado, ni siquiera he llegado a completar la decena de kilómetros habituales. No ayuda mucho a correr deprisa el hecho de que el terreno esté muy blando; sin embargo, esa circunstancia viene fenomenal para proteger las articulaciones, todo un seguro de vida para las rodillas.

Las dos vueltas han supuesto 9,6 km, realizados en un tiempo de 48:14 @ 4:59/km.

No se puede llegar tarde

Otro día más que llego tarde. He salido haciendo el circuito al contrario para cruzarme con mis compañeros y los he visto cuando ya casi terminaban la primera vuelta. En la segunda han empezado a zumbar y me han pillado todavía frío por lo que me ha costado un montón seguirlos y es que Emilio II tiraba muy fuerte.

Yo esperaba un día tranquilo como suele ser un martes, pero en algunos tramos iba como si me fuese la vida en ello. Afortunadamente todo se acaba y después de acabar la segunda vuelta ya amainó el ritmo. Hice algunos kilómetros a ritmo más tranquilo hasta completar 10 km en un tiempo de 49:43 @ 4:58/km.

¿Margen izquierda o derecha?

En el circuito que hago por el Parque Lineal, a la ida el río casi siempre queda a mi izquierda. A la vuelta, durante un par de kilómetros, el río vuelve a quedar a mi izquierda para luego atravesar un puente y dejarlo siempre a la derecha (releyendo lo escrito, me acabo de dar cuenta que tanta izquierda y tanta derecha viene que ni pintado a este día de elecciones).

El tema no iba por ahí, sino que muchos días cuando he recorrido este mismo escenario, me ha surgido la duda de si iba por la margen derecha del río o por la izquierda, tal es mi ignorancia. Como siempre, la wikipedia me ha sacado de dudas con este artículo. La conclusión que saco leyendo dicho artículo es que el circuito del río transcurre en su mayor parte por la margen derecha del Manzanares y que sólo hay un par de tramos que transcurren por ambas márgenes. Uno de los tramos, al final del circuito, lo utilizo para la vuelta. No sé por qué cuento esto, si carece de toda utilidad.

Esta semana ya toca ir disminuyendo kilometraje, lo que llaman los anglosajones tapering, que no significa precisamente ir de tapas… Dicen los entendidos que cuanto más larga sea la distancia a recorrer en la competición, mayor debe ser el tiempo de tapering. Se calcula que para una maratón, hay que estar entre dos y tres semanas bajando la ración de kilómetros recorridos. Como casi todo, yo lo hago a ojo. Pfitzinger dice que la primera semana de tapering, justo después de la semana donde se ha alcanzado el pico de kilometraje, debe bajar a un 80% y en la segunda semana, un 60%.

Veamos pues. Mi pico ha sido de 76 km en la tercera semana, por lo que esta semana hubiese tocado 60,8 km; sin embargo he hecho 63 km. Me he pasado un pelín, ya digo que lo he hecho a ojo. La semana que entra tocaría hacer 45,6 km, veremos cómo reparto porque son pocos kilómetros para cuatro días de entrenamiento.

Después de hacer ayer kilómetros a ritmo de maratón, hoy tenía las piernas algo cansadas, pero al tratarse de un entrenamiento a ritmo fácil, no ha supuesto demasiado problema, aunque en Parque Sur había tanto barro y tan resbaladizo que resultaba difícil avanzar en algunos tramos. En total he completado 24 km en 2:06:12 @ 5:15/km de los cuales los 16 primeros han sido en compañía y el resto, solito.