Todo fue un espejismo

Mis compañeros de martes me comentaron que hoy no iban a poder ir a entrenar, así que esperaba encontrarme solo en el punto de encuentro. Pero al llegar estaba Andrés & company y con ellos empecé el entrenamiento aunque tuve esperar bastante rato a que el forerunner de las narices consiguiera una precisión aceptable (considero aceptable cuando anda cerca de 6 ó 7 metros).

Notaba los cuádriceps algo cargados, lo que indica que el entrenamiento del martes no fue una perita en dulce; sin embargo, a un ritmo tranquilo marchaba bien. Para nuestra desgracia, pudimos comprobar que la buena iluminación de días anteriores fue simplemente un espejismo. Hoy había extensas zonas sin iluminar, por lo que habrá que volver a considerar entregar el papel con las firmas en la junta municipal.

Un tanto enojado por esta situación absurda a la que nos somete un día tras otro la junta municipal, pero por otro lado encantado de correr junto a Andrés se fueron pasando los kilómetros a un ritmo bastante llevadero. Hice 10 km en un tiempo de 53:56 @ 5:24 min/km y con bastante solvencia.

Una de las cosas que hablamos durante el entrenamiento fue de la comida de Navidad que hacemos los corredores pradolongueros todos los años. Esta vez se nos ha echado el tiempo encima y ya resulta imposible hacerlo antes de Navidad como siempre hemos hecho. La mejor alternativa será después de Reyes cuando ya estemos todos de vuelta, ya que en estas fechas cuando no está uno de vacaciones está otro.

2 opiniones en “Todo fue un espejismo”

    1. Hola Javier:

      Esperemos que vuelvan a iluminarlo, que estaba muy bien. Veremos mañana cuando salga por la tarde como está.

      Antes del 31 ya hablaremos para vernos por allí.

      Saludos.

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