Hoy he dado el tercer paso en el camino de participar en la maratón de New York: he comprado los billetes de avión. Si después de pagar la inscripción todavía podía tener dudas de ir o no, ya no hay vuelta atrás, allí estaré el próximo noviembre.
Como muchos sábados, el entrenamiento consistía en hacer kilómetros a ritmo de maratón, es decir, por debajo de 4:30. Una primera vuelta en Parque Sur (3 km) de calentamiento y otras tres vueltas más (9 km) a ritmo de maratón. La verdad es que en este parque cuesta mantener un ritmo constante porque es todo subir y bajar. Los nueve kilómetros han salido a una media de 4:25 min/km, mientras que el entrenamiento total ha sido de 12 km en un tiempo de 54:18 @ 4:32 min/km.
Pensaba que había perdido algo de peso, pero me he llevado una sorpresa al ver que pesaba 100 gramos más que la semana pasada. Es decir, que ya son 67,7 kg lo que llevo a cuestas.