XXIV Maratón Popular de Madrid

Después de que 1999 fuese una temporada extraordinaria, el año 2000 fue una catástrofe. Después de la media de Fuencarral me lesioné y estuve casi dos meses lesionado, yendo a rehabilitación. De nuevo el tendón de aquiles me hizo una mala pasada.

Este año también empecé con mal pie ya que me lesioné en el mes de enero. Estuve yendo al fisio y a finales de febrero pude empezar a entrenar desde cero. En vista de que no iba a llegar al último domingo de abril con un entrenamiento adecuado, decidí prepararme para el maratón de Laredo que se celebraba el último domingo de mayo.

Utilicé, por lo tanto, el MAPOMA como un entrenamiento largo, con la idea de hacer 30 km corriendo y el resto, andando. Al final Juanma no iba muy fino y entre el uno y el otro llegamos a meta como pudimos.

Esta era la XXIV edición de la Maratón de Madrid y salió un día bastante desagradable para correr, sobre todo por la lluvia. El ganador, José Ramón Rey, calificó la prueba como un infierno.

Este año el último domingo de abril fue el día 29 y ese día se celebró la prueba. Como últimamente me ocurre, empecé con mal pie el día. Después de levantarme con tiempo (tres horas antes) para ir tranquilo, al final llegué tarde a la foto debido al desacuerdo entre organizador y EMT para que ese día los corredores pudieran ir gratis en transporte público. Empecé a ponerme nervioso ya que tuve que volver a casa a por dinero. Otro fallo fue beberme casi 1,5 litros de agua antes de la prueba, lo cual me obligó a parar 3 veces durante la carrera a vaciar la vejiga. Al final, aunque tarde, contacté con algunos compañeros de MaraTI+D que todavía andaban pululando por el punto de encuentro. Los rezagados nos hicimos una segunda foto y al poco nos acercamos a la línea de salida donde supuestamente 10.000 corredores esperaban el pistoletazo de salida.

Goyo, JuanMa, Antonio (un nuevo fichaje para el equipo) y un servidor planeamos ir juntos hasta donde fuese posible, siguiendo un ritmo de, aproximadamente, 6 min/km y con esa intención salimos. Tras pasar la glorieta de Cuatroca, Antonio aumentó el ritmo y el grupo expedicionario se redujo en una unidad. El resto del grupo siguió unido hasta el km 25 donde la mayor fortaleza de Goyo se puso de manifiesto y el grupo quedó reducido solamente a dos. A partir del km 27 empezaron los problema para el G.E. y solamente conseguimos proseguir juntos bajando el ritmo y manteniendo la entereza en los peores momentos. Al final llegamos a la línea de meta juntos y hermanados (como buen G.E.) en un tiempo de 4:43:39.

Aunque es mi peor marca de siempre, esta maratón ha sido una de las más gozosas para mi, ya que después de no poder correr el año pasado y sufir tres lesiones jodidas en menos de un año, pensaba que lo de correr (y más una maratón) era cosa de otros. Además, por la última lesión, el entrenamiento había sido escaso. Sin embargo, no he tenido problemas con las lesiones y he cumplido mis objetivos marcados: llegar en condiciones al km 30 y terminar la maratón de cualquier manera. Otro motivo de gozo ha sido realizar toda la carrera con un compañero de MaraTI+D (JuanMa) ya que entre uno y otro, nos hemos ayudado a alcanzar la meta.

La organización me ha parecido brillante, el único pero que puedo indicar, ha sido el desconcierto que me ha provocado el hecho de indicar en el folleto que el transporte sería gratuito cuando al final no lo ha sido, pero en su disculpa, diré que parece ser que había un cartelote en la feria del corredor que indica esta circunstancia, que desgraciadamente no vi.

Para terminar, dar gracias a todos los compañeros de la empresa y de MaraTI+D que han animado al equipo durante la carrera. Si otras veces, se han merecido un 10 por su comportamiento ejemplar, esta vez, ni siquiera un 11 haría justicia. Y esto mismo es extensible al público en general que ha animado de manera impresionante en un día de perros y en medio de un puente salvaje, ¿dónde demonios ha salido tanta gente?

Llegando a meta con Juanma y Cristina

VI 10 km pedestres distrito de Usera

Como otras tantas veces, también participé en la carrera de Usera. Al contrario que otros años que me pareció que la organización rallaba el sobresaliente, esta vez estuvo algo peor. Dos puntos en su contra: la salida se dio, al menos, minuto y medio antes de la hora, por lo que me pilló donde no debía y, lo más importante y peor, en algunos tramos el trayecto estaba abierto al tráfico, aunque perfectamente delimitado con conos. Terminé con un tiempo de 46:01 que refleja el lamentable estado de forma en el que me encuentro.

Este circuito de ida y vuelta me gusta menos que el otro que recorría gran parte del distrito que da nombre a la carrera, pero según me comentó el organizador tuvieron que inventarse este recorrido en el último momento porque la Policía Municipal les dijo que no tenían efectivos para cubrir todos los cruces del recorrido original y de este modo, haciendo de ida y vuelta los cruces a cubrir son menos. Salvaron la papeleta en el último momentos.

La hora de encuentro con los compañeros de equipo se respetó más o menos bien, a eso de las 10:15 pasadas, nos encontramos la mayor parte de los miembros de MaraTI+D en el punto de encuentro más el amigo Liborio que siempre se acerca a saludar.

Foto de equipo Usera 2001
Foto de equipo Usera 2001

XXXVI San Silvestre vallecana popular

Después de un año plagado de lesiones, me decidí a participar en la San Silvestre para terminar bien el año. Como siempre un ambiente excepcional aunque para mi gusto demasiada, demasiada gente.

Tanta gente provocó que tardara casi tres minutos en pasar la línea de salida. Además, nada más empezar se me cruzó un espécimen al que pisé y me provocó un torcedura de tobillo que afortunadamente parece que no ha ido a más.

Haciendo gala de mi baja forma, traté de llevarlo lo mejor posible y entré en meta con un tiempo neto de 47:47 según la organización:

2845 4831 GARCIA BLAZQUEZ MIGUEL A. 00:47:47 00:50:34

Agradecer a Juan Ignacio esa sidra que nunca viene mal después del esfuerzo y a todo el público el ánimo prestado, aunque esta carrera se ha masificado en exceso.

Y con esta carrera, cierro un año negro atléticamente hablando. Esperemos que el año que viene sea mejor.

IV Carrera popular fiestas de Usera

Después de la media de Fuencarral tuve que parar porque tenía molestias en el tendón de Aquiles. La cosa se fue complicando y tuve que ir al médico. Me recomendaron que visitara al Dr. Urzanqui que era un buen especialista en medicina deportiva ya que trabajó en la federación de atletismo y ahora pasaba consulta en una clínica situada en el estadio Vicente Calderón.

Me diagnosticó tendinitis en el tendón de Aquiles, lo mismo que me había ocurrido cinco años antes y que, por supuesto, parase de correr. Entre la visita al galeno, después al médico rehabilitador para que diese el visto bueno a lo recomendado y las distintas sesiones de rehabilitación, llegué al mes de abril sin haber entrenado nada desde mediados de febrero.

Como ya que tenía pagada la inscripción de Mapoma, se me ocurrió tomar la salida sin ningún entrenamiento con la idea de retirarme cuando viese que la cosa se complicaba. Así fue, en el kilómetro 17 me retiré porque las articulaciones me dolían horrores.

Después de esta experiencia, estuve parado por completo y a principios de agosto empecé de nuevo a correr. Dado que en mi barrio se celebraba una carrera popular con motivo de las fiestas, decidí participar.

Se trata de la IV edición de la carrera popular fiestas de Usera, organizada por Eulogio Cortés, el mismo que organiza la carrera de Usera que se celebra en el mes de enero. Tiene la peculiaridad que se celebra el sábado por la tarde, cosa rara en esto del atletismo popular.

La participación era más bien escasa, algo más de 200 personas, debido a que coincidió en el mismo día con la archiconocida “Carrera de La Melonera”. Esto provocó, agradablemente, que no tuviésemos problemas para colocarnos en la salida. Decidimos salir despacio, ya que existe una cuesta arriba llegado al km 1, pero Iñaki, absolutamente ensimismado con la música nos fue sacando cada vez más ventaja, lo que nos obligó emplearnos a fondo para alcanzarle.

Estuvimos juntos un ratillo hasta que Iñaki se fue quedando poco a poco. La verdad es que yo andaba bastante justo y aunque aguanté hasta el km 6 con Jesús, en la cuesta abajo se marchó con zancada grácil hacia la meta. Ya en la recta de meta le vi entrar tan tranquilamente. Yo llegué totalmente roto después de ¡¡7 meses!! sin correr y ¡¡6 meses y medio!! sin entrenar, por lo que mi tiempo final de 37:06 me sorprendió gratamente.

En línea de meta, ningún tipo de problemas de cola ni apretujones. El avituallamiento estuvo muy bien: cerveza, coca cola, agua, naranjas y glucosa. Por supuesto, no faltó la típica camiseta. Me gustó la organización, muy familiar, aunque en su contra he de decir que faltaba el guardarropa. Imagino que la poca afluencia de corredores ayudó a facilitar las cosas a los organizadores.

XVI Media maratón de Fuencarral

Mal, lo he pasado mal, mi peor Fuencarral hasta la fecha. Y es que esta carrera no es ninguna tontería: o entrenas bien o sufres.

Foto de equipo Fuencarral 2000
Foto de equipo Fuencarral 2000

Los primeros 12 kilómetros fui acompañado generosamente por José Juan, que pudiendo ir más deprisa prefirió ir a mi ritmo. En el paso por el km 10 notaba que iba peor que otras veces, pero iba decentemente. En la primera cuesta arriba de consideración, la del cuartel, adelantamos al Caña que iba algo fastidiado. Ahí José Juan se marchó a su ritmo.

En la siguiente cuesta, que va desde el kilómetro 13 al 15, empecé a sufrir, aunque lo peor empezó en la siguiente bajada, una vez superada la tapia de El Pardo. No conseguía alargar la zancada por lo que manadas enteras de corredores me adelantaban si piedad. Al final de la bajada, Silvia animaba sin cesar a los compañeros.

¡Gracias Silvia!

La siguiente cuesta arriba, que sube hasta el cementerio, se me hizo muy dura aunque mantenía el tipo como podía. De nuevo en la cuesta abajo, nuevas manadas de corredores me adelantaban. En la última cuesta importante de la jornada, subiendo los Tres Olivos, ya no corría, reptaba. Sólo los ánimos de Soco, una compañera del trabajo que vino a animarnos, me hicieron llegar a la meta con algo de dignidad, realizando un tiempo de 1:39:05. Mi peor tiempo en esta carrera, ¡cuatro minutos más que el pasado año!

Agradezco de todo corazón la ayuda inestimable de los compañeros que se molestaron en venir a animarnos en esta desapacible mañana. Hago extensible este agradecimiento no sólo a Silvia y a Javier, sino a Soco por sus ánimos en un momento muy complicado.

V 10 km pedestres distrito de Usera

Hoy se ha celebrado la V edición de la carrera de Usera. Para mi gusto el día fue ideal para correr y realizar una buena marca. Lo cual no era mi caso ya que he estado griposo durante una semana y he entrenado poco o mejor dicho, poquísimo.

Foto de equipo Usera 2000
Foto de equipo Usera 2000 (algo borrosa)

Al principio salí con JuanMa y Ángel. Al poco Ángel se perdió y continué con JuanMa hasta el km 5 donde le abandoné cruelmente al ver que flojeaba. Aumenté algo el ritmo de ahí hasta el final para intentar bajar de los 45 minutos y al final lo conseguí por poco, ya que entré en meta con un tiempo de 44:43.

Llegando a meta en Usera 2000
Llegando a meta en Usera 2000

En meta fuimos obsequiados con lo típico: agua, refresco, naranjas y una camiseta de manga larga, cosa nada habitual. Al igual que el año pasado, la organización me pareció perfecta: no hubo problemas de atascos (ni en la salida ni en la meta), kilómetros y curvas perfectamente señalizadas, el avituallamiento en meta también muy bien y todo por el módico precio (es un decir) de 500 pesetillas.

La participación de MaraTI+D no estuvo mal, aunque al final hubo algunas deserciones por distintos motivos. De todas manera, si mal no recuerdo, ocho corredores tomamos la salida: Ángel, Juan José, JuanMa, Andrés, Iñaki, David M., José Gabriel y un servidor. Nos hicimos una bonita foto y hubo de todo: marca acojonante de Juan José (39:22), debut de David sin incidentes y re-debut de Iñaki afortunadamente también sin incidentes. Nos acompañaron los traidores de MarATOS: Liboro y Rogelio con resultado dispar. Liborio hizo un marcón: 38 y pico y Rogelio acabó resentido de un problema físico en los últimos kilómetros, que dicho sea de paso aproveché para adelantarle sin piedad al mejor estilo Ángel: aprovechar unos segundos el rebufo para recuperar algo y esprintar a todo leche al pasarle.

Tenía intenciones de invitar a una cervecilla a los compañeros por aquello de que estaban en mi barrio, pero huyeron despavoridos al poco de terminar, ¡otra vez será!

XVIII San Silvestre toledana

Después de ocuparme de realizar las inscripciones para la San Silvestre Vallecana, al final no pude correr en Madrid. En el último momento, me apuntaron a la San Silvestre Toledana donde intenté hacerlo lo mejor posible. Es ésta una carrera bastante bonito por el marco donde transcurre, la monumental ciudad de Toledo. La carrera comienza y acaba en la plaza de la catedral y pasa por zonas significativas de la ciudad como la plaza de Zocodover o la puerta de Bisagra.

Tiene un perfil algo duro, ya que la primera parte es cuesta abajo y el último kilómetro y medio, cuesta arriba. Realicé un tiempo de 31:42 en los 7,6 km oficiales de los que constaba la prueba.

Me llamó poderosamente la atención el correr durante unos metros (luego me dejó atrás) junto a Ricardo Ortega, ex-recordman nacional de maratón (año 1983, 2:11:51) que a sus 46 años todavía se deja ver en alguna que otra carrera popular. Desde luego, un ejemplo a seguir. Para mi, encarna mi concepto del atletismo: correr desde el principio hasta el fin.

XVI Carrera popular villa de Aranjuez

Se ha celebrado la XVI edición de la carrera popular villa de Aranjuez bajo unas condiciones meteorológicas muy aceptables: solecito y fresquito a la vez. Sólo dos maratidianos nos dimos cita en esta hermosa carrera: Fernando y un servidor. La salida se retrasó 15 minutos por el ansia de los organizadores de apuntar a cuantos más mejor. Al final se llenó el cupo de 1000 corredores (con dorsal) al que se añadieron 250 sin dorsal.

Corrí con Parra, que ya me acompañó en el Cross de los Tres Refugios, por lo que comencé un poco acelerado, lo que me hizo andar algo fastidiado desde el km 5 al 7. Al final me recuperé algo y eché el resto en la pequeña cuestecilla, terminando mi carrera a unos 100 m antes de la meta en un terrible atasco de corredores. Llegué a «meta» con un tiempo de 42:17 aunque no tengo claro si recorrí 9,9 km o, como todos los años, algo menos. Apuesto por esta última posibilidad.

La llegada estaba organizada horriblemente. Los «nuevos medios informáticos» -consistentes en un código de barras, dando la impresión de ser un enorme paquete de embutido- de los que se jactaban por megafonía antes de darse la salida provocaron un enorme atasco ya que sólo había dos calles pasada la línea de meta. Después de meterte en una de las calles recorrías un largo recorrido (200 m aproximadamente) para llegar un mostrador con al menos 10 personas de las que sólo las dos primeras daban regalitos. Este consistía en el típico plato de cerámica, batido de chocolate, bollito, bote de refresco y demás zarandajas.

Creo que las organizaciones se equivocan tratando de controlar al segundo las clasificaciones. Soy de la opinión que deberían controlar sólo a los primeros -quizás 50, quizás 100- y los demás podrían entrar asaco en la meta, de esta manera se ahorrarían muchos problemas. Colocando además la zona de «regalos» lejos de la meta no se formaría el atasco «antes de» sino «después de». Otros años en Aranjuez no había tanto control y nunca había problemas de atasco.

Al final sí hubo jornada gastronómica y, por supuesto, en el Rte. La Alegría de la Huerta. Fernando llevaba prisa y se marchó raudo, así que después de una ducha en el polideportivo nos dimos la gran comilona, disfrutando de los exquisitos manjares que se sirven en la citada casa de comidas ¡os aseguro que el entrecote que manduqué ha sido de los mejorcitos que he probado! Lástima por los que quisieron pero no pudieron ir, se perdieron un buen día para correr.

XX Carrera popular de Canillejas

Coincido con mi compañero Goyo en que la recogida de ropa fue lo más duro de la carrera con diferencia. Ahí la organización falló estrepitosamente, colocando un solo punto de devolución de ropa (5 ó 6 personas atendiendo) para una carrera de más de 3000 participantes, con la meta en distinto sitio de la salida y con un frío que pelaba, ¡creo que estuvimos al menos 20 minutos hasta que pudimos recoger la ropa!

Hasta ese momento la organización me había parecido normal aunque con algunos puntos débiles:

  • No vi ningún kilómetro señalizado y aún no tengo claro si los arcos de plástico indicaban el kilometraje.
  • El avituallamiento en el km 5, aunque yo no cogí agua, pude apreciarlas dificultades que tuvieron mis compañeros de pelotón para tal menester.

Yo salí tranquilo con JuanMa ya que no intentaba hacer marca ni nada por el estilo. Es por eso que nos pusimos algo atrás en la salida junto a Fernando. Esto motivó que tardáramos 45» en cruzar por la alfombra de salida. Fernando salió pitando y luego, bajando por Arcentales, se quedó JuanMa y anduve solo hasta la meta. Algo después del km 5 vi a Angel, al que intenté animar lo más posible (cosa que después me reprochó sobremanera), aflojando el ritmo para que pillara rueda, pero al volver la vista atrás ya no vi ninguna camiseta de MaraTI+D por lo que proseguí a mi ritmo. En el último kilómetro tuve bronca con un espécimen que me dio un codazo después de haberme dado otro bajando Alcalá, lo cual me espoleó para llegar fuerte a meta. Entrando con un tiempo oficial de 45:51.

Desgraciadamente, llegué tarde a la cita del punto de encuentro por no haber calculado bien el tiempo que podía tardar en metro, aunque me alegró encontrarme con gente nueva , ¡nos veremos en las próximas carreras!

También me gustaría dar las gracias a todos aquellos que estuvieron animando a pesar de la mañana tan desagradable que hacía.

XIX Carrera del CSIC

Hoy se ha celebrado la carrera del CSIC. Ayer, justo antes de acostarme me di cuenta de que había olvidado en la empresa los dorsales de la gente a la que tenía que dárselos a la hora de la carrera. Mi mujer se negó rotundamente a madrugar para acercarme en coche, así que me tocó madrugar a mí en exceso y pillar un taxi. Luego metro hasta la Pl. de la República Argentina, donde llegaba a las 9h10′. Había llovido por la noche, pero a esas horas no llovía y la temperatura era buena para mi gusto y para Angel, un poco alta.

Dado el nerviosismo propio de la ocasión, tuve que acercarme rápidamente a los servicios donde pude contemplar con desazón la inmensa cola -de gente- que había para hacer uso de estos inventos. Estando esperando, vi como poco a poco el reloj se acercaba a las 9h30′ e incluso las sobrepasaba. Algo más tarde y después de…, nueva cola -también de gente- para recoger el chip. Curiosamente, todos los quioscos de reparto de chips estaban vacíos menos el que me tocaba a mi.

Afortunadamente, estando en la cola se acercaron Francisco y Javier a los que pudedarles el chip y el dorsal, sin embargo Alberto no apareció por allí. Entregué mi ropa en el guardarropa y trotando me acerqué al punto de encuentro a eso de las 9h45′ y ¡Alberto tampoco estaba! Le estuve esperando con el chip y el dorsal en la mano hasta tres minutos antes de dar la salida, cuando se lo entregué a Javier G. -todos esperamos verte pronto de corto- por si casualmente le veía en estos momentos postreros.

La salida fue verdaderamente horrorosa. Por el asunto de Alberto estaba atrás del todo del pelotón con Mariano con el que había planeado correr sobre los 5’/km. Tardamos sobre 40» en pasar la pancarta de salida y no sé cuántos más en comenzar a correr. Viendo que el pelotón andaba algo pastoso me puse a correr por la acera y en ese momento ya no volví a ver a Mariano hasta la meta. Cerca del km 2 cogí a Angel -que se había parado a atarse la zapatilla- y estuvimos juntos un par de kilómetros o más hasta que con mi ágil zancada le fui dejando atrás poco a poco. Pasé por donde ponía km 5 con 26′ y treinta y tantos segundos, viendo que mi intención de acercarme a los 50′ se aleja bastante. Ya que mi salida fue muy tranquila, aceleré algo el ritmo aunque me parecía difícil cumplir el objetivo (tiempo < 50′). Sin embargo, me pareció que el kilómetro entre el punto donde ponía 6 km y el de 7 km era más corto que los otros. Imagino, que la organización -en su infinita sabiduría-, sabiendo que la primera parte era más fácil que la segunda, puso en aquella los kilómetros más largos y en la segunda, más cortos para que el corredor tuviera una sensación subjetiva de igual dificultad durante todo el recorrido. Pues eso, al final llegué a meta sorprendentemente con un tiempo oficial de 49:27 en una distancia aproximada de 10,4 km.

Es una carrera bastante sosa de animación, pero los acompañantes de MaraTI+D se portaron extraordinariamente animando al personal. Gracias a todos.

No hubo ningún problema en la línea de llegada gracias a los chips. La devolución de chips se hizo fácilmente a cambio de una bolsa con una camiseta y una botella de agua. Había un quiosco donde daban refrescos. En este aspecto, la cosa estuvo bastante bien. Un buen grupo de compañeros nos quedamos en el césped durante el sorteo, disfrutando un poco del sol que lucía esplendorosamente ayer por la mañana. Lástima que a algunos no se les vió el pelo por ningún sitio.

La organización no estuvo mal del todo. Se libran por poco del cero pelotero en la calificación. Lo peor de todo fue el cambio de recorrido sin avisar de ninguna manera de que la carrera no eran 10 km. La salida también es un poco desastrosa: un enorme grupo (80% al menos de la totalidad) estaban por delante de la pancarta de salida. Lo demás más o menos correcto, aunque pecaron de racanería, ya que que 8 servicios para 2000 tíos o más era un número ciertamente escaso como se demostró con las enormes colas que se formaban delante de estos habitá-culos.