¡Enhorabuena compañero!

El pasado domingo nuestro compañero Joaquín, en la primera edición de la carrera popular lago de Pareja, consiguió auparse al tercer puesto del cajón de su categoría.

¡Enhorabuena campeón!

Lo cierto es que Joaquín está fuerte como el vinagre, lo he podido «sufrir» en los últimos entrenamientos, donde he sido incapaz de acercarme a él. Está claro que en su principal objetivo, la media de Villarrobledo, se va a salir siempre y cuando le respeten las lesiones, que confiemos en que sí.

joaquin-meta
Entrando en meta

Corriendo hoy por el parque me comentaba que aunque la carrera es dura, con alguna subida y, sobre todo, alguna bajada bastante fuerte consiguió un magnífico tiempo de 41:40, unos segundos más de lo que hice yo la semana pasada, pero con la particularidad de que la carrera en la que yo participé era absolutamente llana y ésta, todo lo contrario.

También me dijo que hizo casi toda la carrera con la chica que aparece en la foto entrando en meta. Casualmente, esta chica llegó un poco antes que yo en el Trofeo San Lorenzo después de protagonizar una bonita lucha con otra chica de la que fui testigo.

Aunque la hazaña de Joaquín es de consideración, no hay que olvidar que mientras él se batía el cobre por tierras guadalajareñas, en Berlín, un poco más al norte, el keniata Dennis Kimetto batía el récord del mundo de maratón con un tiempo increíble de 2:02:57 consiguiendo bajar de las dos horas y tres minutos. El segundo clasificado, Mutai, que llegó a 17 segundos del ganador también consiguió bajar del anterior récord. Las dos horas están al caer.

Echando cuentas, veo que el ritmo llevado por Kimetto ha sido de 2:55 min/km, algo que no sería capaz de seguir ni cincuenta metros. Es interesante la pregunta que hace Marca, ¿puede un popular ir ritmo de récord del mundo? Curioso el vídeo.


Después de ir el domingo a ritmo tranquilo, no como Kimetto, hoy estaba muy bien de piernas y necesitaba correr después de un par de días un tanto agobiado, así que después de dar la primera vuelta a un ritmo muy tranquilo, traté de hacer la segunda a ritmo umbral, que en mi caso, en este momento, no es otro que 4:20 min/km. Sí, casi a ritmo de récord del mundo 😉

Y salieron los kilómetros a un ritmo bastante igual: 4:15 (pelín rápido), 4:23, 4:20, 4:21 y 4:20. Bien, bastante bien, además me encontré muy cómodo, con unas sensaciones inmejorables. El entrenamiento a umbral es el que más me gusta sin lugar a dudas. El ritmo es moderadamente duro y, por lo tanto, factible con un esfuerzo no muy exagerado.

Hice en total 10 km en un tiempo de 49:44 a un ritmo de 4:58 min/km, pero dividido en dos partes claramente diferenciadas: los primeros cinco kilómetros en 28:05 @ 5:37 min/km y los segundos cinco en 21:39 @ 4:20 min/km.