Hoy ha sido el último día donde he exigido a mis piernas algo más que un suave trote. Como casi todos los sábados, hoy tocaba hacer kilómetros a ritmo de maratón, pero en vista de que era el último, sin obsesionarme demasiado con el ritmo.
Ha estado lloviendo con cierta frecuencia estos días y el terreno estaba muy blandito, por lo que resulta más difícil ir más deprisa. Una razón más para no preocuparme demasiado del cronómetro.
Una primera vuelta (3 km) de calentamiento y las otras tres (9 km) tratando de mantener un ritmo sobre los 4:35 min/km. Como suele ocurrir, algunos fueron más lentos y otros, más rápidos, obteniendo una media de 4:33 min/km en esos nueve kilómetros. Veremos sin en NY soy capaz de mantener un ritmo similar, que pienso puede ser un ritmo que me permita acabar la maratón dignamente.
Sumando calentamiento más kilómetros a ritmo de maratón, han sido 12 km, recorridos en 56:41 @ 4:43 min/km.
Hoy la báscula marcaba 68 kg, bastante más que la semana pasada, pero hay que tener en cuenta que anoche nos dimos una opípara cena en un restaurante indio que no está nada mal. El restaurante se llama Indian Aroma por si alguno quiere probar.