En años pretéritos el objetivo principal del año era la maratón de Madrid. Desde que me diagnosticaron la condromalacia cambié ese objetivo por uno menos ambicioso y he entrenado estos últimos años lo mejor que he podido la Media Maratón de Villarrobledo.
Este año me había fijado de nuevo como objetivo la media de Villarrobledo, pero los quince días pasados en la antípodas me han hecho cambiar de objetivo porque allí no entrené mucho y me veo corto de preparación para llegar a esa localidad albaceteña como me gustaría. Es por eso que me he fijado un nuevo objetivo tres semanas después, que no es otro que la Media Maratón de Madrid. Hace muchos años que no corro esta carrera en condiciones y ya veremos cómo llego este año. Espero que bien.
La pega principal que tiene esta carrera es su precio, desde mi punto de vista excesivo. He pagado 25,60 € y me parece un pastón. Sí, ya sé que me dirán que es para ayudar al Club Marathon y tal y cual…
Cuando corrí por primera vez esta carrera, que no era una media sino 20 km, allá por 1996, el precio de la inscripción fue de 800 pesetas, o lo que es lo mismo, 4,80 €. Así que calculen Uds. lo que ha aumentado. En fin, vamos a lo que vamos.
Habíamos quedado a las 10:00 en el punto de encuentro y allí aparecimos Quique, Miguel y yo. Estuvimos saludando a los jubilados, pero no nos apuntamos a su grupeta. Bajamos al río e hicimos cuatro kilómetros de calentamiento y al pasar ese punto aceleré para tratar de hacer cuatro kilómetros a un ritmo cercano al umbral, tratando de bajar de 4:20. El último me costó, debo reconocer, ya que no pude bajar de ese ritmo objetivo y se me fue a 4:24; sin embargo, los otros salieron bien: 4:17, 4:17 y 4:20. Y aunque iba deprisa, Quique se fue por delante y Miguel se quedó por detrás esta vez. Hice en total 11,3 km en un tiempo de 57:00 @ 5:02 min/km.