Voy a resumir en esta entrada los entrenamientos que hice en Bajamar, Tenerife, durante mi estancia vacacional en esta localidad.
Lunes 10 de agosto. El día anterior había corrido el cross de Bajamar por lo que no tenía muchas intenciones de salir, pero un chaval conocido me animó a salir con él porque tenía un plan de entrenamiento de pretemporada futbolera. Así que no pude negarme y salí con él. Ese primer día de su segunda semana consistía en hacer treinta minutos de carrera continua. Curiosamente, ese día cuando estábamos dispuestos a salir estaba lloviendo a raudales, pero eso no importa a dos aguerridos corredores, así que salimos como si tal cosa. Así paso, que nos calamos hasta los huesos y además comprobamos que el terreno es duro de narices. No sé muy bien cómo, pero acabamos llegando a la Avda. del Club Náutico de Bajamar que es una cuesta larga pero dura. Ahí demostró que la juventud es un grado. Subió mi acompañante como si tal cosa mientras que yo iba echando los pulmones por la boca. Acabamos esa avenida y volvimos sobre nuestros pasos. Hicimos en esos treinta minutos unos 5,5 km @ 5:26 min/km. Aparte de mojarnos bastante, no tuve ningún problema con la picadura y notaba los tendones de aquiles que me tiraban un montón. Eso me pasa por salir dos días seguidos.
Miércoles 12 de agosto. Tocaba carrera continua de veinte minutos, cinco minutos andando y quince minutos corriendo de nuevo. Optamos por tirar hacia Punta del Hidalgo hasta completar esos veinte minutos. Allí nos volvimos andando esos cinco minutos y luego nos pusimos a correr. En total hicimos en esos cuarenta minutos 7 km clavaos @ 5:43 min/km. También este itinerario es duro, pero ya nos habíamos dado cuenta que daba igual ir para un sitio que para otro. Sólo hay subidas y bajadas vayas donde vayas. Así que resignación. Hoy me molestaban menos los aquiles.
Viernes 14 de agosto. Bajada caminando del Teide por el sendero siete, unos 9 km de bajada que se traducían en cuatro horas y media… nos dijeron. Subimos en el teleférico hasta la base del Teide, pero por desgracia no teníamos permiso para subir a la cumbre así que cambiamos el ascenso a la cumbre por la bajada por el sendero siete. No fue buena idea porque una buena parte del sendero es por pequeñas piedras rodadas por las que te resbalabas con una facilidad pasmosa. De hecho, una de las componentes del grupo se hizo un esguince al resbalarse. Eso sí, mereció la pena por el paisaje, verdaderamente espectacular.
Vista de la cumbre del Teide desde donde llega el teleférico
El sendero siete llega hasta el punto kilométrico 40,5 de la TF-21. Desde allí había todavía un par de kilómetros hasta donde habíamos dejado el coche aparcado, parte de los cuales los hicimos trotando
Domingo 16 de agosto. Tercer día de su segunda semana de entrenamientos. Consistía en hacer dos tramos de veinte minutos de carrera continua metiendo entre tramo y tramo cinco minutos corriendo. Hicimos como el día anterior el camino hacia Punta del Hidalgo, sólo que llegamos algo más lejos. Fuimos bastante tranquilos a la ida, pero a la vuelta empezamos a dar a la zapatilla e hicimos un kilómetro en 4:44, otro en 4:33 y los últimos ochocientos metros, ya muy favorables, a 4:02. Al ser la vuelta tan rápida, llegamos al punto de salida ¡tres minutos antes! así que no completamos los cuarenta y cinco minutos previstos. De esta forma completamos 7,8 km en un tiempo de 42:04 @ 5:24 min/km. El chaval aguantó como un campeón y yo acabé bastante bien.
Con estos entrenamientos acabamos su segunda semana de pretemporada. No volvió a llovernos otra vez durante los entrenos, aunque sí lo hacía con cierta frecuencia. Lo mejor es que no hacía mucho calor, corría el viento y solía estar nublado, aunque hubiese bastante humedad. Fenomenal, porque los entrenamientos en Madrid de junio y julio han sido una auténtica tortura debido al intenso calor. E incluso, recuerdo el año pasado en Mojácar que o madrugabas o los entrenamientos eran bastante duros con la suma de calor y humedad.
Martes 18 de agosto. Carrera continua 1×10′ y 1×20′ y entre las series de carrera continua meter cinco salidas a sprint entre 20 y 30 metros al 80%. Planteamos hacer las salidas a sprint en la zona donde están situadas las piscinas de Bajamar, que es un terreno llano. Así, después de diez minutos por las calles de Bajamar fuimos al sitio señalado (que es por donde se meten los surfistas al mar) y vimos que hasta la tercera farola eran más o menos los treinta metros… muy a groso modo. Hicimos cuatro series supuestamente al 80% y le propuse hacer la última hasta la cuarta farola a muerte. ¡Qué ochenta por ciento ni qué leches! Ahí me demostró el mozalbete que zumba de lo lindo, ya que en esos cincuenta metros me sacaría diez. Para hacer los veinte minutos que nos quedaban fuimos como siempre hacia Punta del Hidalgo, aunque, por supuesto, no llegamos. Nos dimos la vuelta en la Cafetería Melita. Hicimos 6 km con la carrera continua y las series.
Miércoles 19 de agosto. Senderismo por el macizo de Anaga, todo de bajada como el otro día en el Teide. Según la wikipedia, el macizo de Anaga es una formación montañosa y región histórica del nordeste de la isla canaria de Tenerife, España. Es el lugar que cuenta con mayor cantidad de endemismos de Europa y fue nombrado Reserva de la Biosfera por la UNESCO el 9 de junio de 2015.
Habíamos planeado la salida desde el restaurante de la Cruz del Carmen. Allí nos acercaron en coche y cuando íbamos a comenzar la caminata vimos que había un grupo de atletas «traileros» que se disponían a realizar un entrenamiento conjunto. Estaban haciéndose la típica foto de grupo antes de salir. Y estaban a punto, porque cuando llevábamos recorridos doscientos metros nos adelantaron todos. Luego vimos subir a unos pocos. Imagino que el grueso del pelotón volverían por otro camino porque a esos no los vimos.
Cartel indicando el camino a Bajamar desde la Cruz del Carmen
Hasta Bajamar son 10,5 km como indica el cartel y el paisaje es alucinante. Una verdadera maravilla. Según va bajando va cambiando y luego no es tan frondoso, pero merece la pena. Como curiosidad, decir que nos adelantaron unos tipos en bicicleta de descenso que se metieron por unas sendas que resultaba casi difícil pasar andando, no quiero ni imaginarme cómo pasarían con la bici.
Jueves 20 de agosto. Carrera continua 1×5′ y 1×20′ y entre las series de carrera continua meter ocho salidas a sprint entre 20 y 30 metros al 80%. Hicimos más o menos lo que el día anterior, pero me parecía que cinco minutos sólo antes de hacer unas salidas a sprint era poco, así que lo prolongué un minutos más, tampoco mucho, que el chaval decía que había que hacer únicamente los minutos que decía el plan. Esta vez no hicimos la última a muerte como el día anterior, sino que todas más o menos al mismo ritmo, ese 80% teórico. Hicimos en total 5,4 km este día.
Y de esta forma se acabaron las vacaciones veraniegas. El sábado 22 de vuelta ya estábamos de vuelta a Madrid después de dos semanas en tierras tinerfeñas.
Y para terminar, un tirito en las piscinas naturales de Garachico, mostrando cómo se clava la entrada en el agua.
Clavando la entrada en el agua